One Piece: ‘Seré el rey de los piratas’

Este jueves se estrena la primera temporada del live-action de Netflix y promete ser la redención de adaptaciones de anime

Riqueza, fama, poder, sólo una persona puede conquistar todo lo que el mundo puede ofrecer y, para lograrlo, debe emprender una aventura por el océano. Y así es como empezó la gran era de los piratas.

No se necesita mucho más para entrar al universo de los Sombreros de Paja, creado por el mangaka Eiichiro Oda, a partir de este jueves cuando Netflix libere los primeros episodios del live-action One Piece, uno de los más esperados por la comunidad otaku de este año.

Y lo mejor es ver al actor mexicano Iñaki Godoy como encargado de dar vida al protagonista de la historia, Luffy, un pequeño corsario que obtiene la capacidad de estirar su cuerpo como liga luego de comerse la extraña fruta goma goma, parte de las conocidas frutas del diablo que otorgan poderes a sus consumidores.

En la primera temporada, programada para emitir 10 capítulos, se cubrirá el famoso arco introductorio East Blue, donde la gente podrá descubrir cómo Luffy obtiene el deseo de convertirse en el Rey de los Piratas y líder de su propia tripulación para conseguir el anhelado cofre que dejó el legendario capitán Gol D. Roger.

El resto de la historia, como las batallas en contra de Buggy, Alvida y Arlong, entre otros, se descubrirá en los capítulos que están por aparecer disponibles en el catálogo de Netflix y que contaron con la supervisión del propio Eiichiro Oda para evitar flaquear como lo hizo la plataforma con las fallidas adaptaciones de Death Note o Cowboy Bebop, por mencionar un par de producciones épicas y sumamente criticadas.

Pirata irreverente

Uno de los puntos más discutidos por el fandom mundial fue la elección de un mexicano como encargado de un emblemático personaje japonés, y fue controversial porque Luffy está al nivel de popularidad de Goku, Vegeta (de Dragon Ball), Naruto, Saitama (One Punch Man), Los Caballeros del Zodiaco, entre otros.

Sin embargo, a comparación de otras producciones, aquí la última palabra siempre la tuvo su creador, el misterioso Eiichiro Oda, el mangaka de la identidad desconocida al que el mexicano ya pudo ponerle rostro durante un viaje que hizo a Tokio, Japón, para saber por qué él carga con tan importante responsabilidad.

“Me preocupaba si podíamos encontrar a alguien como Luffy”, le dice al joven de 20 años, al interior de su desordenada y escultural casa. “Pero vi muchos videos de audiciones y, cuando te vi, empecé a reírme. Eres como el personaje que dibujé en mi manga y no me imagino a nadie más interpretándolo”, culminó.

Iñaki le regaló un dibujo hecho por él mismo y, como recompensa, el propio artista lo nombró como el único e insustituible Luffy colocando el sombrero de paja en su cabeza.

Un mes antes, el actor compartió la experiencia al conocer a Mayumi Tanaka, la encargada de poner voz a Monkey D. Luffy desde el estreno del anime en 1999.