¡El Ajax vive una situación dramática!

Uno de los clubes más grandes del continente se enfrenta a la crisis institucional y deportiva más importante de su historia reciente

Cristales en el suelo, la entrada principal destrozada, carreras fuera del estadio, altercados e incendios en las gradas. El estado en el que quedó el estadio del Ajax en el partido ante el Feyernoord tras las protestas de los ultras era el reflejo cristalino de la situación por la que atraviesa el club al completo.

Decimocuartos en liga, fuera de Champions y firmando el peor inicio de una temporada desde 1964. El director deportivo se ha visto obligado a dimitir por las presiones de sus ultras y el presidente del Consejo de Administración, Erlinga, también ha dejado su puesto. El entrenador, Steijn, podría ser el próximo en hacerlo si no mejor sus resultados antes del próximo parón.

Cuesta pensar en este Ajax como el equipo que hace no demasiado tiempo enamoró a todo un continente. Estuvo a tan solo unos segundos de meterse en la final de la Champions. El partido ante el Tottenham quedará marcado en el recuerdo de muchos aficionados, no tan solo de Ajax o ‘spurs’ sino del fútbol, como uno de los encuentros más emocionantes de la competición.

Bajo la batuta de Ten Hag, el conjunto liderado por los De Jong, Tadic, Ziyech, Neres, Blind o Schone protagonizó una epopeya europea que alcanzó su apogeo en esa goleada en el Santiago Bernabéu. El rey de Europa se rendía ante un equipo joven que deslumbraba por su estilo.

Años más tarde, el encuentro que fue suspendido ante el Feyenoord con un 0-3 y que, tras la reanudación, terminaría con un cuarto gol que certificaba dos cosas: una dolorosa goleada ante su rival y la caída de un gigante europeo a la mayor crisis institucional que ha vivido en la historia reciente.

Una ‘foto íntima’, el inicio de la debacle
Esas semifinales de Champions en la 18/19 fueron seguidas de victorias solventes en la Eredivisie. El Ajax dominaba con puño de hierro su campeonato y parecía todo intocable. Todo eran risas y felicidad hasta que en febrero de 2022, salió a la luz un hecho deleznable que marcaría un antes y un después.

Marc Overmars, director deportivo del club, envió una foto íntima a una empleada en los baños de un edificio del Ajax. Poco más tarde, se acabaría filtrando que no era la primera vez que eso sucedía. Como no podía ser de otra manera, el exjugador dimitió. “De repente sentí una presión enorme. Pido disculpas. Sin duda, para alguien en mi posición, este comportamiento es inaceptable. Ahora veo eso también. Pero es demasiado tarde. No veo otra opción que dejar el Ajax”.

Su puesto no fue ocupado por nadie. Fueron Van der Saar primero y Klaus-Jan Huntelaar junto Gerry Hamstra los que ayudaron a esta función sin demasiado éxito. A todo ello le siguió la salida del gran creador de este Ajax: Ten Hag. El entrenador se embarcó en una aventura en el Manchester United y dejó su cargo en manos de Heitinga que, aunque no alcanzó las cotas de su predecesor, consiguió al menos ganar un campeonato local.

La guerra entre el director deportivo y el entrenador
La crisis institucional se ha llevado por delante al director deportivo, Sven Mislintat, poco más de 100 días después de su llegada. La relación con el técnico no era la mejor y así lo demostraron las declaraciones de este último en las primeras jornadas. “Nosotros presentamos nuestras ideas, pero Mislintat ha tomado decisiones diferentes”.

Siete de los doce fichajes que llegaron en verano se quedaron en el banquillo en el último clásico en un dardo claro a la dirección deportiva. Su salida finalmente fue debida a un tema más complicado de conflicto de intereses. Sosa, fichaje de este verano procedente del Sttugart, está representado por una agencia que tienen acciones en la empresa de sistemas de datos comerciales de Mislintat. Las sospechas levantadas llevaron a su dimisión.

“Nosotros presentamos nuestras ideas, pero Mislintat ha tomado decisiones diferentes.”

Además de ello, el equipo ha perdido una cantidad de talento enorme este mercado. Jurrien Timber, Mohammed Kudus y Edson Álvarez salieron del club y las llegadas fueron en gran parte futbolistas jóvenes, desconocidos y sin experiencia. Todo ello ha creado un caldo de cultivo que ha dejado al Ajax con una crisis total en todos sus ámbitos y con una salida complicada. El enfado de sus ultras va en aumento y los resultados no mejoran. Un gigante está en peligro.